Las Dammusi, construcciones típicas de la isla, situadas en los espléndidos valles de Monastero y Siba y usadas en el pasado por pescadores y agricultores, han sido adaptadas y convertidas en confortables viviendas. Se yerguen a sólo 6 km del mar, en los confines de Santa Teresa, una granja de 40 hectáreas de viñedos, que producen cepas de Nero d’Avola y Cabernet. Además, la granja cuenta con olivares, huertos de hierbas aromáticas, verduras y bosques. El complejo se presenta como el destino ideal para disfrutar del silencio y la tranquilidad de una pequeña isla y alberga un jardín árabe con 2 piscinas para relajarse.
Cómo llegar: