Construido a finales de 1800, a poca distancia de la famosa Passeggiata Imperatrice, el hotel goza de una excelente ubicación, en pleno golfo de San Remo y con vistas al mar. Se encuentra en un parque de 10000 m2 de bosques tropicales. Ofrece acceso privado a la playa. Su ubicación en un entorno natural de apacibles jardines proporciona un ambiente tranquilo y relajante. Su proximidad al mar y a las playas hace que sea un lugar perfecto para tomar el sol y descansar en la Riviera italiana. Muchas de las habitaciones ofrecen vistas a los pintorescos jardines del Mediterráneo. Otras cuentan con pequeños balcones con vistas al mar. Todas las habitaciones disponen de TV por satélite, teléfono y minibar.
Cómo llegar: